A los muchachos.
Van caminando como ciegos
entre las calles muy solas.
En mi ciudad abandonado y sucia
con olor revolucionario,
de orín
desde la plaza los veo pasar
donde hubo un tiempo
días de glorias.
¿ Quien escribirá el dolor de
estos muchachos?
Todo el tiempo brilla el
silencio,
por eso quisiera pintar en cualquier parte
la muerte que vive entre nosotros.
La escritura nos hizo ser duro,
se han rotos las preguntas
que se podían hacer
y así poblar con las mejores
ideas,
hacer las buenas conversaciones
que brille de nostalgia
con ese bello silencio
en las miradas de los muchachos
para juntos escucharlos,
seguramente tendremos
domingos de recuerdos con
sus pequeños fantasmas
saltando entre las luces
de sus ideas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario